21 septiembre 2008

Las piezas de mi puzzle

Mañana se supone que llega el otoño, pero ya hay hojas en el suelo. Es inevitable, lo sé, pero me gustaría que fuera verano todo el año. Tranquil@s, este post no va del agobio que nos entra a todos en esta época del año, ni va de una de mis minidepresiones de todo a 100...

A mi alrededor el amor se desmorona, evapora, desaparece, cae... Parejas que en mi mundo perfecto deberían estar juntas y felices (sí ya sé que suena a cuento de hadas pero tengo mi mundo imposible e irreal) no lo están. Camino por un sendero angosto y alrededor veo corazones rotos, llantos imparables, almas en pena, dolor e impotencia. Yo no puedo ayudar ni hacer nada, la empatía hace sufrir hasta al más pintado. Me siento como un náufrago que todavía no ha llegado a tierra, nadie está a salvo, así que sálvese quien pueda ¿no? Ni siquiera soy capaz de componer una canción sobre ello.

¿Tendrá que llegar la primavera para que la gente se enamore de nuevo? ¿Quién tiene la patente de la felicidad? ¿Por qué el final del verano trae la marea baja que te arrastra y engulle?

Hoy puede que me dé el último baño, os lo dedicaré.

4 comentarios:

Mar dijo...

Nada... basta con pensar que todo es efímero que hasta los más grandiosos llantos, hay un día en el que cesan, mientras tanto... ¡vivamos!
Todos los amores son grandes mientras se viven.
¡Feliz otoño!

Anónimo dijo...

Hoy he pasado el día en la playa de la Magdalena, olvidando completamente que el otoño estaba acechando detrás de los árboles . Lo siento por esas parejas rotas, solo puedo decir que es mejor haber amado.

A.S. Olivier dijo...

Are you talkin´to me? ...

fdo. Robert De Niro frente al espejo (Taxi Driver)

Miss Underground dijo...

Tha, qué bueno volver a verte por la red, no sabía que habías regresado, te seguiré de cerca.

Enigmala, como siempre estoy de acuerdo contigo.

Tito, la he visto el sábado e irremediablemente he pensado en tí, bang bang...