Después de unas semanas ajetreadas llenas de conciertos, teatro, cine mudo, terracitas con amig@s, descubrimientos humanos inesperados y bienvenidos, exposiciones y un largo etcétera me voy de vacaciones.La Dolce Vita me espera en las calurosas calles de Milán, en las plazas de Bérgamo o tal vez en una villa en el lago Garda. Me tomaré un negroni a vuestra salud.
¡Disfrutad que son dos días...!


